Por fin tenemos en nuestro almacén los nuevos ejemplares de Mear Sangre. Muy pronto en todas las librerías que merezcan tal nombre. Un libro contundente y crudo como pocos. Como él dice “todo es verdad”, eso es lo bueno. Y lo malo.
Dum Dum-teca
MEAR SANGRE, portada definitiva
Aquí tenemos las cubiertas definitivas desplegadas del “Mear Sangre”. Impreso en tintas roja y azul evocando muchos de los carteles boxísticos de la época. Ha quedado impresionante.
Encuadernado en rústica, plastificado en mate, cosido y con solapas generosas. La portada llevará el título hendido con un golpe en seco.
El abominable hombre del ring
Así titulaba el semanario deportivo “Dicen” su entrevista a Dum Dum Pacheco en las semanas previas a las navidades de 1971. Acababa de derrotar a Vallecillo en un combate que puede leerse en términos de venganza.
Los lectores de “Mear Sangre” tal vez recuerden que en su enfrentamiento anterior con Pablo Vallecillo, Pacheco sufre una clamorosa derrota, dramática, que le marcará. En el libro se detallan los motivos que le llevan a caer de manera estrepitosa ante el vallisoletano y cómo, tras la pelea, tiene lugar el suceso que da título a su autobiografía. Dum Dum Pacheco mea sangre por primera vez.
A título anecdótico, Dum Dum nos comenta que las dos chicas con las que posa para el reportaje son Chonchi Alonso, la que fuera esposa de Andrés Pajares, y una amiga de esta.
11/5/1973
Hace cuarenta y ocho años, tal día como hoy, Dum Dum Pacheco sufría uno de los escasos KO técnicos de su carrera. En el Pabellón Polideportivo del Real Madrid contra el hispano marroquí Mimoun Mohatar. La noticia aparecía en el número 188 del mes de junio de 1973 de la revista “Boxeo” de la Federación Española de Boxeo.
De su puño y letra (El País)
Anticipándose unas semanas a la noticia, la revista ICON, suplemento del diario El País del 1 de mayo, se hace eco de la inminente reedición de Mear Sangre. Eduardo Bravo habla con Dum Dum Pacheco, quien comenta algún pasaje de su militancia en la banda juvenil de los Ojos Negros. También se anticipan los nombres de las autoras de prólogo y epílogo: Jimina Sabadú y Mery Cuesta.